Constelaciones
Centauro
Datos generales
Centaurus (castellanizado Centauro) es una extensa constelación visible parcialmente desde la península ibérica. Es la novena constelación más grande, y ocupa un área de 1.060 grados cuadrados del cielo nocturno del hemisferio sur. Se encuentra en el extremo norte de la Vía Láctea.
Limita al norte con la región más oriental de Hydra, y al sur con Compás, Musca y Cruz del Sur, englobando a esta última en tres cuartas partes de sus límites. A los lados están Lupus, al este, y Vela y parte de Carina, al oeste.
Además de por su gran tamaño, es muy facil de encontrar por ser una constelación muy brillante, con 10 estrellas más brillantes que la magnitud 3,00, entre ellas las brillantísimas Rigil Kentaurus y Hadar, de magnitudes menores a 1,00..
Tiene 8 estrellas por debajo de los 32,62 años luz de distancia a la Tierra. Alfa Centauri es el sistema estelar más cercano, y en concreto su componente α Centauri C, conocida como Proxima Centauri, una enana roja situada a 4,24 años luz del Sol.
En esta constelación, concretamente en el sistema estelar α Centauri, en la estrella Proxima Centauri (o Alfa Centauri C) está el exoplaneta confirmado más próximo a la Tierra: Proxima Centauri b (también llamado Alfa Centauri Cb o, abreviado como Proxima b). Su descubrimiento fue publicado en la revista Nature en agosto de 2016, utilizando el instrumento HARPS, un espectrógrafo instalado en el Telescopio de 3,6 metros de ESO (Observatorio Europeo Austral) ubicado en el Observatorio de La Silla en chile.
El descubrimiento de Proxima b se confirmó en 2020 con el instrumento ESPRESSO (Echelle SPectrograph for Rocky Exoplanets and Stable Spectroscopic Observations —«Espectrógrafo Echelle para Exoplanetas Rocosos y Observaciones Espectroscópicas Estables»—) del VLT (Very Large Telescope —«Telescopio Muy Grande»—) del citado observatorio ESO.
Es de tamaño algo mayor a la Tierra (1,08 veces el diámetro terrestre), con un masa 1,27 veces la de la Tierra. Tarda 11,2 días en recorrer su órbita, la cual está a 0,05 UA de su estrella. Por ello, a pesar de desplazarse dentro de la zona habitable de Proxima Centauri (Alfa Centauri C), ques es la región donde puede existir agua líquida en la superficie del planeta, su proximidad a la estrella le somete a presiones de viento estelares de más de 2.000 veces los sufridos por la Tierra desde el viento solar.
En enero de 2020 se publicó en la revista Science Advances el descubrimiento del que podría ser el segundo planeta del sistema. El candidato, llamado Proxima Centauri c (también Alfa Centauri Cc o Proxima c) tiene, aproximadamente, 7 veces la masa de la Tierra. Orbita a gran distancia de Proxima Centauri por lo que es poco probable que sea habitable, por su baja temperatura. De hecho el estudio apunta a que se trata de un planeta rocoso, pero se encuentra más allá de lo que se conoce como la línea de nieve, a partir de la que los planetas suelen ser gigantes gaseosos; ello hace que no se cierre ninguna hipótesis.
El descubrimiento de estos exoplanetas «próximos» dio pie al proyecto del ACESat, un telescopio espacial cuyo único objetivo sería detectar posibles planetas habitables en el grupo de estrellas más cercano a nosotros: Alfa Centauri. Sin embargo, Eduardo Bendek, subinvestigador principal de ACESat, estimó que había un 15 % de posibilidades de que no hubiera planetas en las zonas habitables de las dos estrellas Alfa Centauri, lo que, de momento (según noticias de 2021), ha hecho que la NASA no apruebe aún el proyecto.
El equipo de ACESat propuso una misión que examinaría no sólo a Alfa Centauri sino también a otras estrellas cercanas, aunque la ampliación de la misión aumentaría el coste.
Un tercer exoplaneta de Proxima Centauri parece haber sido descubierto, también por medio de ESPRESSO, a principios de 2022. Se le ha llamado Proxima d y orbita a la estrella a una distancia de unos cuatro millones de kilómetros (menos de la décima parte de la distancia de Mercurio al Sol), por lo que está por debajo de la zona habitable del sistema. Tarda solo cinco días en completar su orbita. Proxima d tiene tan solo la cuarta parte de la masa terrestre, siendo el exoplaneta más ligero jamás medido utilizando la técnica de velocidad radial1.
El descubrimiento de Proxima d fue publicado en la revista Astronomy & Astrophysics el 10 de febrero de 2022 y detallado en la correspondiente noticia de la web de la ESO.
Por otro lado, el 10 de febrero de 2021, se anunció un posible candidato a planeta en la zona habitable de α Centauri A denominado C1. Lo encontraron aplicando una nueva técnica y 100 horas de observación con el VLT (Very Large Telescope. C1 podría ser un planeta del tamaño de Neptuno situado aproximadamente a 1 UA de Alpha Centauri A.
Hay, además, otras estrellas interesantes en esta constelación. La Estrella de Przybylski (V816 Centauri) es una estrella peculiar extrema, una estrella pulsante prototipo de las estrellas Ap de oscilaciones rápidas (roAp).
Otra estrella Ap, V827 Centauri, posee uno de los mayores campos magnéticos detectados, 17.300 veces mayor que el del Sol. También es digna de mención la Estrella de Krzeminski (V779 Centauri), sistema binario eclipsante compuesto por una estrella de neutrones (Centaurus X-3) y una caliente gigante azul. La estrella de neutrones es un pulsar de rayos X con un período de 4,84 segundos.
Como objeto del cielo profundo tenemos uno muy especial: la Nebulosa del Boomerang, una protonebulosa planetaria situada a 5.000 años luz de la Tierra. Su gran peculiaridad fue detectada en 1995, cuando el Telescopio Submilimétrico del European Southern Observatory descubrió que su temperatura es de tan solo 1 K (-272 °C), un grado por encima del cero absoluto, la temperatura más fría conocida del universo fuera de un laboratorio. Es el único objeto conocido con una temperatura inferior a la radiación de fondo de microondas.
A 17.000 años luz de distancia y con un diámetro de 150 años luz tenemos a NGC 5139, el cúmulo globular más grande conocido de la Vía Láctea. Tiene unos 10 millones de estrellas y una masa total equivalente a 4 millones de masas solares, lo que lo convierte en el cúmulo globular más masivo conocido de la Vía Láctea. Tiene diez veces el tamaño del siguiente cúmulo más grande, y una magnitud de 3,7, según Wikipedia, o 5,33, según Stellarium. Es, además, el cúmulo globular más luminoso de la Vía Láctea, con más de un millón de veces la luminosidad solar.
Este cúmulo también se llama Omega Centauri (ω Cen) porque en el año 150 d. C., el astrónomo grecorromano Ptolomeo catalogó este objeto en su Almagesto como una estrella, ubicándola en el lomo del caballo («Quae est in principio scapulae»). El cartógrafo alemán Johann Bayer utilizó los datos de Ptolomeo para designar este objeto como «Omega Centauri» en su publicación de 1603 de Uranometria.
Sin embargo el astrónomo inglés Edmond Halley, tras observarlo en 1677 con un telescopio desde el Atlántico sur, lo clasificó como un objeto no estelar. Posteriormente, tanto el astrónomo suizo Jean-Philippe de Cheseaux como el francés Lacaille lo catalogaron como nebulosas.
Fue reconocido por primera vez como un cúmulo globular por el astrónomo escocés James Dunlop en 1826, quien lo describió como un «hermoso globo de estrellas muy gradual y moderadamente comprimido hacia el centro».
Otros cúmulos de Centauro son NGC 3766, o Cúmulo Perla, un cúmulo abierto a 6.300 años luz de la Tierra, de magnitud 5,30; tambíen NGC 5662 (Cúmulo Polilla Gitana, de magnitud 5,50, y NGC 5460, otro cúmulo abierto, a 2.300 años luz de la Tierra, con magnitud 5,50.
La Nebulosa NGC 3918 está a una distancia entre 2.600 años luz y 5.346 según fuentes, y su magnitud es de 8,5. Se bautizó como Planetaria Azul por su color parecido al de Urano cuando fue visto por primera vez por su descubridor John Herschel (aunque la nebulosa es aparentemente tres veces más grande que el planeta).
En cuanto a galaxias, encontramos a Centauro A (NGC 5128), una de las galaxias activas más cercanas a la Tierra (entre 11 y 16 millones de años luz de distancia).
Al igual que Merak y Dubhe se consideran estrellas pointers («punteros»), ya que señalan al polo norte celeste, α y β Centauri son los pointers del polo celeste sur. Esto es porque si extendemos la línea que las une llegamos al eje menor de la Cruz del Sur. También son útiles para localizar con bastante aproximación este polo, ya que si trazamos una linea perpendicular a la unión de ambas, llegaremos a este punto. La distancia a recorrer por esa línea imaginaria nos viene marcada por el corte entre ella y otra que parte del árbol (o eje longitudinal) de la Cruz del Sur.
En un inicio esta constelación era mayor ya que incluía, como asterismos, a las constelaciones vecinas de Lupus, un animal no especificado, ya sea en las manos del centauro o empalado con su lanza, la Cruz del Sur, que componían las piernas del centauro, y Compás (Circinus), que se consideraban estrellas indefinidas bajo los cascos delanteros del centauro.
1 La técnica funciona mediante la captación de pequeñas oscilaciones en el movimiento de una estrella provocadas por la atracción gravitacional de un planeta en órbita. El efecto de la gravedad de Proxima d es tan pequeño que solo hace que Proxima Centauri se mueva hacia adelante y hacia atrás a unos 40 centímetros por segundo, lo cual indica la tremenda precisión del instrumento.